Un Enemigo Invisible

Nociones Corales
25 septiembre, 2020

Por Daniel Silberfaden para la Fundación Tejido Urbano

“Es sabido que los miedos hacia lo desconocido suelen agrandar nuestros monstruos y, consecuentemente, aumentamos hacia el infinito los mecanismos y presupuestos de la defensa.”

Los gobiernos hablan de un enemigo invisible; el nuestro menciona uno también, pero más invisible aún que cualquiera, más poderoso y, por ahora, invencible.

Por Daniel Silberfaden¹

Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida…

Woody Allen

En el exterior hay (dicen) una guerra declarada. Los gobiernos hablan de un enemigo invisible; el nuestro menciona uno también, pero más invisible aún que cualquiera, más poderoso y, por ahora, invencible. Un Covid19 a la argentina” que nos obligará a la más larga cuarentena del planeta, dentro de un túnel donde aún no se logra ver la salida. Es posible que sea el miedo la mejor manera de lograr un disciplinamiento global, rodeados de un discurso científico que da a cada palabra un halo racional y creíble, pese a las contradicciones que medias bibliotecas científicas tienen.

El gran estratega y general ateniense Pericles, aquel héroe que llevó a Atenas a su máximo esplendor del milenario imperio, murió por la plaga en un verano del 430 AC. Plaga que comenzó matando a los esclavos que habían huido del campo a la ciudad y luego le llegó el turno a los ciudadanos” atenienses. Pero con aquella plaga que tres veces -en menos de diez años- atacó Atenas, también llego la otra, la del escepticismo de los atenienses hartos de velar a sus muertos, esperando refugiados dentro de sus casas que todo pasara. Mientras esperaban en cuarentena, fueron perdiendo la fe en los dioses y en la humanidad. Dejaron de observar el decoro y la ética y dejaron de creer en sus líderes. Los atenienses empezaron a buscar a los culpables de sus muertos y desdichas. El imperio de Atenas quedó, desde entonces, herido de muerte. Aquella generación que quiso dar vida a un estado ideal y se afanó en la búsqueda de la verdad, equidad y justicia, el amor por la belleza y su búsqueda de la ciudad perfecta, la ciudad de los pares y para los pares, se fue derrumbando y nunca más reencontró el camino para reconstruirla. Fue el principio de su fin.

No querer ver al enemigo, invisibilizarlo, es crear lo temible. La estrategia tradicional de la guerra siempre necesitó de un enemigo visible para medir y recalcular. Es sabido que los miedos hacia lo desconocido suelen agrandar nuestros monstruos y, consecuentemente, aumentamos hacia el infinito los mecanismos y presupuestos de la defensa. ¿De qué manera? Inmovilizando a la población, impidiendo reunirse aun manteniendo las distancias recomendadas o simplemente sentarse en el espacio público o la práctica física al aire libre. Encerrados y aislados parece ser la mejor medida para combatir al enemigo invisible. Por eso, nuestro espacio público -el espacio de todos- dejó de ser el lugar histórico y natural de la expresión popular, dejó de pertenecernos por decisión de quienes nos dirigen y estos, a su vez, dirigidos por un grupo escogido de médicos, asesores que detentan el monopolio del saber y la capacidad de ver lo que nosotros, simples ciudadanos, no vemos. Exigen que les creamos, nos piden un verdadero acto de fe a 189 días de un encierro obligatorio, tratándonos como niños que ya no somos, un crédito que perdieron inmediatamente por la falta de un plan de salida y una comunicación adecuada, dadas las innumerables contradicciones de sus mensajes y acciones.

Como los remeros que navegan hacia adelante viendo hacia atrás, aprendamos de la historia y vislumbraremos gran parte de nuestro futuro.

Nuestro espacio público -el espacio de todos- dejó de ser el lugar histórico y natural de la expresión popular, dejó de pertenecernos por decisión de quienes nos dirigen.
¹ Arquitecto FADU-UBA, ex presidente de la Sociedad Central de Arquitectos (SCA), Profesor Titular Regular de Proyecto de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y actual decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Palermo.
Fotografías: ANRed, CC by 4.0, https://www.anred.org/2020/07/29/quien-paga-la-cuenta-del-coronavirus-en-america-latina-y-el-caribe/; y Ezarate, CC BY-SA 4.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=88747430.