La Impostura

Nociones Corales
3 noviembre, 2020

Por Elena Liberatori para la Fundación Tejido Urbano

“Estamos viviendo la paradoja impensable de que un virus, que no es vida, sino una mera partícula, nos acecha por doquier cambiando para siempre casi todo.”

En esta época de sueños rotos y de horizontes que no sirven para seguir caminando, como decía Galeano, ha venido la primavera hermosa en los árboles, las flores, las abejas y el canto de los pájaros.

Por Elena Liberatori¹

La esperanza es una impostora infalible. En esta época de sueños rotos y de horizontes que no sirven para seguir caminando, como decía Galeano, ha venido la primavera hermosa en los árboles, las flores, las abejas y el canto de los pájaros. No obstante, que los zorzales no estén cantando al amanecer se agrega al montón de hechos inusuales que por invadirnos han suplantado esa cotidianeidad que creía detestable por momentos, y que ahora añoro. Me pregunto: ¿volveré a viajar en subte o en tren, a caminar despreocupadamente a mi oficina o hacia la hermosa London de Avenida de Mayo y Perú donde hay unos macarons deliciosos y gigantes, con gusto, sabor y color a lavanda o rosas, y donde Cortázar permanece sentado en su mesa de siempre? La incertidumbre ha devenido en el eje vital. Cuando ocurrió aquel tsunami en Tailandia, hace un tiempo, el eje de la Tierra cambió su posición, y no recuerdo las consecuencias ostensibles de tal hecho grandioso. Aun así, el cielo siguió luciendo diáfano, Marte o Venus en las madrugadas silenciosas, la inefable constelación de Orión solapando el caos estelar a la mirada humana que prefiere ver lo que no existe: esas figuras mitológicas, diosas y vírgenes, cazadores y fieras; todo lo humano allá arriba en sus amores y odios, venganzas y tragedias. Estamos viviendo la paradoja impensable de que un virus, que no es vida, sino una mera partícula, nos acecha por doquier cambiando para siempre casi todo. “Nostalgia” es la palabra más veces dicha. “Tristeza” la que le sigue. Nuevas realidades, como los encuentros virtuales, sean de trabajo o sociales; nuevas rutinas, como que salir a la calle con el barbijo sea como tener que llevar el DNI, o bancarizar todo para evitar tocar el dinero en efectivo, y también buscando permanecer en contacto con muchas personas que hacían a nuestra vida de hogar y de trabajo. Todo atravesado por la tecnología para indagar lo que se ignora, para vislumbrar alguna certidumbre, y para que, no obstante, nada sea igual a como era antes. Y nada lo será. Y he aquí la impostura de la esperanza.   

Nuevas realidades, como los encuentros virtuales, sean de trabajo o sociales; nuevas rutinas, como que salir a la calle con el barbijo sea como tener que llevar el DNI.
¹ Abogada (UBA), actualmente titular a cargo del Juzgado N.° 4 en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la ciudad de Buenos Aires.
Fotografías: GCBA, CC by 2.5, https://www.buenosaires.gob.ar/subte/nuestros-avances/noticias/trabajamos-en-la-puesta-en-valor-de-la-estacion-retiro-de-la-linea-c y https://www.buenosaires.gob.ar/noticias/este-fin-de-semana-volvio-sabe-la-tierra-y-sigue-ba-market